Sólo será exigible a partir de cinco días al mes. El polémico salario mínimo para transportistas desplazados a otro país, medida ya implantada por un buen número de países europeos, solamente será exigible cuando el trabajador pase más de cinco días al mes fuera de su país, si prospera el nuevo paquete legislativo para el sector que ya tiene listo la Comisión Europea y que se hará público el próximo 31 de mayo. Así lo ha revelado Joaquín del Moral, director general de Transporte Terrestre, durante su intervención en la Asamblea de Astic el pasado 26 de mayo en Barcelona, quien no ha dudado en afirmar sobre la nueva normativa que “soy optimista, la música suena bien”.No menos relevante sobre el salario mínimo es el hecho de que cuando entre en vigor la nueva normativa tendrá que ser el Estado donde está ubicada la empresa el que deberá hacer la comprobación correspondiente al cumplimiento de la Ley, con lo que las empresas no estarán obligadas a llevar a bordo la documentación traducida ni contar con representante legal en ese otro país.

    Durante su discurso, Del Moral avanzó también que la nueva legislación comunitaria sobre cabotaje plantea una situación equivalente a la actual pero más fácil de controlar por los servicios de inspección, con lo que se pasará de un límite de tres operaciones en siete días a un total de cinco días sin límite de operaciones.

    No menos relevante es todo lo que tiene que ver con la vuelta a casa de los conductores de transporte internacional, una de las batallas planteadas en Europa por buena parte del sector español y que ha sido claramente apoyada desde el Ministerio de Fomento. En este punto, el director general no quiso ocultar su moderada satisfacción porque la Comisión Europea haya aceptado “por fin la regulación de la vuelta a casa, aunque ahora vamos a ver si es suficiente tal y como quede planteada, puesto que si no es así lo es pelearemos”.

    En concreto, el planteamiento de la Comisión pasa porque tras partir de un descanso semanal de 45 horas se puedan hacer hasta tres descansos reducidos semanales de 24 horas para que cuando el conductor vuelva a casa tome las 45 horas más las 21 horas que no se han tomado multiplicadas por tres. “Esto mejora la solución actual, porque los conductores no tendrá que pasar nunca el descanso de 45 horas en medio de la ruta, y al mismo tiempo zanja el debate sobre si pueden hacerlo en la cabina“, detalló Del Moral.

    No quiso dejar el director general la oportunidad de volver a defender los motivos que han llevado a España a no firmar la Alianza por la Carretera, y que tienen que, tal y como recuerda cada vez que tiene oportunidad, con la implantación de medidas proteccionistas que van en contra del transporte internacional y rompen la unidad de mercado por parte de los países firmantes, si bien apuntó que “tampoco estamos a favor de la liberalización absoluta que quieren los países del Este”.

Lucha contra empresas buzón

    La lucha contra las empresas buzón no va a quedar fuera del objetivo del departamento que dirige Violeta Bulc. De hecho, llega una regulación más amplia del concepto de establecimiento, el cual va a tener que ir ligado a que los vehículos tengan que estar matriculados y a que haya una proporcionalidad en la actividad de esa empresa en el país en el que esté registrada, con un número de transportes nacionales o internacionales con origen o destino en esa base, un personal administrativo necesario, personal directivo, “es decir que donde esté la operación de la empresa esté la estructura necesaria para que opere”, recalcó.

Llega el nuevo ROTT

    Ya dentro de España se avanza con el nuevo ROTT, y hoy lunes 29 de mayo Fomento presenta el borrador al sector, un documento en el que se mantienen las cuatro secciones dentro del Comité Nacional (transportistas, centros de transporte, operadores e internacional) a pesar de que no ha habido un consenso absoluto en el seno del propio sector sobre este capítulo. Además, Del Moral confirmó que el documento mantiene el requisito de los tres vehículos pero suprimiendo la posibilidad de reducir flota después de los tres años.